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Esta situación de aprendizaje introduce al alumnado en el trabajo científico mediante experiencias prácticas, seguras y contextualizadas. A lo largo de diez sesiones, se aprenden las destrezas básicas de la investigación —formular preguntas, elaborar hipótesis, medir, registrar y comunicar resultados— utilizando materiales habituales de laboratorio y herramientas digitales. El producto final será un cuaderno o póster de investigación presentado en un mini-congreso escolar.

Esta situación de aprendizaje nos invita a explorar la electricidad como una manifestación fundamental de la materia y una fuente esencial de energía en nuestra vida cotidiana. A través de experimentos, simulaciones y montajes de circuitos, comprendemos cómo se generan, transmiten y transforman las corrientes eléctricas, y qué efectos producen sobre los materiales. Con un enfoque activo, experimental y cooperativo, el alumnado aprende a observar, medir e interpretar los fenómenos eléctricos, aplicando las leyes de la física para promover un uso responsable y sostenible de la energía.

Esta situación de aprendizaje nos invita a descubrir cómo las fuerzas dan forma al movimiento y a todo lo que ocurre a nuestro alrededor. A través de experimentos sencillos, simulaciones y retos prácticos, comprendemos las leyes que gobiernan el movimiento, desde la caída de una manzana hasta la órbita de los planetas. Con un enfoque activo y cooperativo, el alumnado aprende a observar, medir y explicar los fenómenos físicos que hacen posible la vida y la tecnología moderna.

Esta situación de aprendizaje propone que el alumnado viva la música desde la práctica activa y el trabajo cooperativo, asumiendo un papel protagonista en la creación, interpretación y comunicación de un proyecto musical propio. A través del proceso de composición, ensayo y presentación, los y las estudiantes aplican de forma integrada los contenidos del lenguaje musical, la expresión vocal e instrumental y el uso de recursos tecnológicos, desarrollando una comprensión más profunda del hecho musical como manifestación artística y social. El aprendizaje se construye desde la experiencia y la experimentación, favoreciendo la autonomía y la toma de decisiones colectivas.

Esta situación de aprendizaje tiene como propósito que el alumnado comprenda cómo la música actúa como un puente entre el pasado y el presente. A través del análisis, la interpretación y la creación de obras que integran elementos tradicionales y contemporáneos, los y las estudiantes desarrollan una visión crítica y apreciativa del patrimonio sonoro. Se parte del reconocimiento de la música como manifestación cultural, social y emocional, fomentando la comprensión del contexto histórico y la evolución de los estilos musicales. Además, se promueve el uso de la voz, el cuerpo, los instrumentos y las herramientas digitales como medios expresivos al servicio de la comunicación artística.

La presente situación de aprendizaje se fundamenta en el reconocimiento de la música como un lenguaje capaz de transmitir emociones, sentimientos e ideas. A lo largo de las diez sesiones, el alumnado tendrá la oportunidad de explorar los elementos básicos del lenguaje musical, el ritmo, la melodía, el timbre y la armonía, descubriendo cómo su manipulación permite comunicar distintos estados anímicos y narrar experiencias personales y colectivas. La propuesta combina la escucha activa, la práctica instrumental y vocal, la improvisación y el movimiento, ofreciendo al alumnado un abanico de recursos para expresarse de manera creativa y auténtica.

Esta situación de aprendizaje parte de la necesidad de comprender cómo la energía está presente en todos los fenómenos naturales y en la vida cotidiana, así como la importancia de su uso responsable en un contexto de crisis climática y sostenibilidad. A través de la observación, la experimentación y la reflexión cooperativa, el alumnado explorará las formas y transformaciones de la energía, sus fuentes y su impacto ambiental. Se fomenta el pensamiento crítico y computacional mediante la búsqueda, análisis y representación de datos energéticos, con el fin de promover una conciencia científica y sostenible para afrontar los retos energéticos del futuro.

Esta situación de aprendizaje tiene como finalidad que el alumnado comprenda las transformaciones químicas que ocurren en la materia y sea capaz de interpretarlas desde una doble perspectiva: lo que se observa a simple vista (nivel macroscópico), y lo que ocurre entre átomos y moléculas (nivel microscópico). A través de actividades experimentales, dinámicas interactivas y análisis de situaciones reales, el alumnado descubrirá cómo las reacciones químicas están presentes en la vida cotidiana, en la cocina, en la industria y en el medio ambiente, reconociendo su papel tanto en los procesos naturales como en los tecnológicos. La finalidad última es que el alumnado tome conciencia del papel de la química como ciencia que transforma la materia y también como herramienta para el desarrollo sostenible, comprendiendo que conocer las reacciones químicas permite mejorar la calidad de vida y proteger el entorno.

Esta situación de aprendizaje dota al alumnado de la terminología y la conjugación básica de todo lo que gira en torno a la salud, el bienestar y las consecuencias de la práctica deportiva, tanto a nivel físico como mental.

La presente situación de aprendizaje se centra en el desarrollo de la escucha activa como herramienta fundamental para el trabajo en el aula de música. El alumnado aprenderá a identificar parámetros del sonido, timbres instrumentales y vocales, así como géneros musicales de distintas épocas y culturas. La propuesta combina la percepción auditiva, la reflexión y la expresión de opiniones fundamentadas, lo que permite consolidar un vocabulario musical básico y, al mismo tiempo, fomentar una actitud crítica y respetuosa hacia la diversidad cultural y estética de las músicas escuchadas.