Mi estancia profesional en el Lycée Margarite de Valois en Angoulême (Francia) ha sido una experiencia muy gratificante y sobre todo, muy productiva. Soy Roser Vidal Monferrer, profesora de Geografía e Historia en el IES Professor Broch i Llop de Vila-real, docente en activo desde hace más de de 25 años. Durante los últimos cursos soy la responsable del programa de historia en la Sección Bachibac de mi centro. Siempre dispuesta a emprender aventuras y a mejorar mi capacitación, he podido disfrutar de dos semanas de intercambio lingüístico y pedagógico con mis colegas franceses. Ha sido, sin duda, una estancia muy enriquecedora a nivel profesional, pero también académico y personal ya que he podido hacer grandes amigos con los cuáles espero colaborar en un futuro.
El Lycée Margarite de Valois es un macrocentro com más de 1500 alumnos que comparte instalaciones con el Lycée des Métiers Jean Rostand y que también está vinculado al Collège del mismo nombre situado anexo y a formaciones de postgrado en las mismo centro. El Lycée imparte el Baccalauréat Générale et Technologique com múltiples opciones de especialidad. Además cuenta con una sección Internacional y tiene implantado el Programa Bachibac, es decir, imparten una parte del currículum en español, al mismo tiempo que enseñan lengua y literatura española, historia de Francia y España en español. El centro dispone de Internado que acoge unos 400 alumnos de los alrededores.
A pesar de sus dimensiones la acogida por mis colegas franceses ha sido francamente buena. Durante mi estancia he podido observar el funcionamiento del Bachibac en un instituto francés, saber cual es su programa, forma de trabajar y de evaluar. He participado en las clases de español y de francés aportado visiones de la historia desde España. He puesto en práctica la metodología francesa que ya solemos utilizar en bachibac y que se caracteriza por ser mucho más analítica. Lo más importante es construir el propio saber a partir de diferentes propuestas que diseña el profesorado. Se aprende a problematizar sobre los documentos a partir de los cuáles se van extrayendo los contenidos. La forma de trabajar es mucho más practica e interactiva aunque inevitablemente supone limitar la amplitud y la profundidad en los contenidos dados.
He comprobado cómo el alumnado francés se enfrenta al mismo tipo de dificultades que nuestro alumnado y compartir dudas, inquietudes y visiones entre los dos países, desde los estereotipos a sus experiencias personales, ya que algunos alumnos habían podido disfrutar de algún intercambio en un centro español.
A nivel personal ha sido todo un reto porqué no habíamos trabajado previamente ni tenía ninguna referencia de Angoulême. Además de hacer grandes amigos, me ha permitido vivir una experiencia inmersiva total ya que he pernoctado en el internado, con todas las ventajas y las desventajas que ello supone. Al final, el balance es positivo porque me ha permitido compartir y ver más de cerca el funcionamiento de los centros escolares más allá del puramente académico.
A nivel curricular la estancia ha sido muy enriquecedora. Me ha encantado descubrir todos los recursos disponibles especialmente la impresionante Mediathèque. He podido trabajar con muchos recursos de historia en francés, tanto de Francia como de España o del mundo. Tienen publicaciones sobre la guerra civil, el franquismo, obras sobre el mundo actual y los grandes conflictos. He podido consultar mucho material y recursos metodológicos que serán muy útiles para mi trabajo. He disfrutado de compartir información en francés, de conocer diferentes puntos de vista, etc.
Sin duda, uno de los grandes descubrimientos ha sido conocer cómo de viva tienen la memoria histórica de los españoles que estuvieron en los campos de concentración después de la Guerra Civil durante la Segunda Guerra Mundial y conocer cómo el primer convoy de 927 deportados españoles a Mathausen partió de Angoulême. Fruto de estas investigaciones es el Museo de la Resistencia y de la deportación y los trabajos que anualmente el alumnado elabora sobre el tema.
Este ha sido el comienzo de una colaboración que espero sea fructífera. Tenemos planes para trabajar proyectos de historia bilaterales a través de plataformas como etwinning. También se ha comentado la posibilidad de realizar intercambio con el collège o intercambios de larga duración entre los dos países con alumnos que puedan estar durante un mes.
En fin, estoy orgullosa de la experiencia y aunque a veces se presentan dificultades, el resultado vale la pena ya que el compartir experiencias y abrir nuevos horizontes supone un gran progreso en nuestra tarea docente.