¡Hola! Soy José Manuel, maestro de educación primaria bilingüe en el CEIP Manuel Laza Palacio de Rincón de la Victoria, Málaga, y he tenido la suerte de realizar una estancia profesional entre el 5 y el 16 de mayo de 2025 en Kvarbackens skola en la segunda ciudad más antigua de Finlandia: Porvoo. La ciudad cuenta con cerca de 52.000 habitantes, de los que un 63% son fineses parlantes, un 28% sueco parlantes y un 10% hablan otras lenguas. El centro fue construido en 1954, pero ha sufrido dos grandes renovaciones en 2012 y 2018, por lo que las instalaciones están en muy buen estado. Estudian en el mismo 350 alumnos.
¡Saber aprovechar el tiempo en tu estancia!
Aunque he pasado la mayor parte del tiempo en Kvarbackens skola, he podido conocer cómo trabajan en otros cuatro centros sueco parlantes, ya que el sueco es, además del finés, idioma oficial en Finlandia utilizado por muchos de sus vecinos. Los centros a los que he podido asistir son: Strömborgska skolan, un colegio de reciente construcción de educación primaria y secundaria; Sannäs skola, un pequeño colegio de primaria recientemente renovado situado a las afueras de Porvoo y en el que trabajan con una enfoque interdisciplinar; Lyceiparkens skola, un instituto de educación secundaria con unos recursos materiales excelentes: y Kulloon skola, un pequeño centro de primaria, situado a mitad de camino entre Helsinki y Porvoo, parecido a un centro rural español y en donde comparten los espacios comunes alumnos que tienen el finés y el sueco como idioma materno.
Qué me traigo de mi estancia: memorias y reflexiones
Ante todo, y comparando los sistemas educativos entre España y Finlandia nos encontramos con que el sistema del país nórdico es mucho más flexible que el nuestro y los centros cuentan con mucha más autonomía que los españoles para tomar decisiones e incluso contratar a los docentes que quieren. El horario no es el mismo para todos los alumnos y varía en función de la edad: los más pequeños entran más tarde y salen antes y los de los últimos cursos de primaria y los de secundaria son los que entran antes y pasan más horas en el colegio. Los profesores tienen menos horas de docencia directa y más tiempo para preparar materiales y descansar entre clases. Aquí en España nos encontramos con unos horarios saturados de docencia, mucha burocracia y nada de tiempo para coordinarnos con otros compañeros.
La segunda cosa que es necesario mencionar es que las ratios son mucho más bajas que en nuestro país, y rara vez se superan los 20 alumnos por clase. Los finlandeses tienen muy en cuenta los propios ritmos de aprendizaje y no presionan al alumnado ya que les importa mucho el bienestar emocional del mismo. Dicho esto, el número de lecciones que se dan cada día suele ser entre 3 y 4, mientras que en España suelen estar en torno a 5.
En tercer lugar, se debe resaltar la cantidad de recursos con los que cuenta el sistema educativo finlandés: muchos más recursos humanos, económicos (invierten mucho más en educación) y materiales. El número de profesores es mayor y cuentan con la figura del asistente (inexistente en España y muy necesaria) por lo que en cada grupo hay, al menos, dos adultos siempre (si no más) lo que hace que la atención sea mucho más individualizada y diferenciada. Cuentan con recursos tecnológicos de última generación y están integrados en su justa medida en la enseñanza-aprendizaje del alumnado. Igualmente, como se basan mucho más en preparar a los niños/as para ser autónomos en el futuro y las clases son muy prácticas, disponen de máquinas de coser, cocinas totalmente equipadas donde estudian economía doméstica y aprenden a cocinar, limpiar, poner lavadoras, planchar, etc. También disponen de unos talleres con herramientas increíbles en los que trabajan con madera y algunos metales como el hierro. En este aspecto van muy por delante a nosotros.
En resumen, ha sido una experiencia recomendable, enriquecedora y animo a los compañeros que puedan a poder disfrutarla y a vivirla, ¡realmente merecerá la pena!
Saludos, José Manuel.