Estancia profesional en Istituto Comprensivo Statale Francesco Querini en Mestre (Italia)

Estancia profesional en Istituto Comprensivo Statale Francesco Querini en Mestre (Italia)

Mi nombre es Leticia Hernández López y trabajo desde 2009 como maestra de Audición y Lenguaje para la Consejería de Educación de la Región de Murcia.

Hará como año y medio envié un e-mail a todos los colegios de Venecia, necesitaba que algún/a dirigente scolàstico/a se aventurase a invitarme a visitar su centro durante dos semanas. Comienzo contando esto porque sí: porque hace falta un poco de arrojo, porque la vida pocas veces regala cosas buenas si no las buscas y porque la que la sigue la consigue. Y así fue. Una única escuela me contestó: el Istituto Comprensivo Statale Francesco Querini.

La Querini, como la llama todo su claustro, se encuentra en Mestre, una ciudad nacida tras la Segunda Guerra Mundial a menos de 10 km de la majestuosa Venecia. Es una escuela grande. Escolariza a 718 alumnos de l’Infanzia, Primaria y Secondaria di Primo grado en tres edificios separados en dos calles próximas.

Lo curioso de este centro es que prácticamente el 90 % de su alumnado es de origen bangladesí. De hecho, el barrio en el que se ubica, circundante a la estación de tren, es coloquialmente conocido como el sestiere dei bengalesi (barrio de los bengaleses). Este hecho se debe a que una importante empresa de construcción naval que opera en Venecia tiene sede en Bangladés, por lo que muchos de sus trabajadores emigran a la urbe italiana en busca de una vida mejor.

Escolarizando a uno o ningún estudiante italiano por aula, esta escuela tiene ante sí un reto cultural importante. Cuenta por ello con mediadores culturales que ayudan a la comunicación entre el profesorado y las familias.

El entorno sociocultural no puede ser más enriquecedor. En la clase de l’Infanzia G, por ejemplo, cuentan todas las mañanas del 1 al 10 en los cinco idiomas de las cinco nacionalidades de sus alumnos: italiano, bangladesí, chino, francés y español. Una de las experiencias que atesoro es la de este grupo de 3 a 5 años cantando en italiano la canción Goccia dopo goccia, cuya letra habla de cómo unidos los seres humanos logramos cosas grandes.

Las dos scuole dell’Infanzia (Educación Infantil) de la Querini no agrupan a los niños atendiendo a su fecha de nacimiento. Lo hacen siguiendo un criterio numérico, con el fin de que todas las aulas tengan un número similar de estudiantes, independientemente de si un año se matriculan más o menos niños de tres años. De modo que en todas ellas hay niños de 3-4, 4-5 o 3-5 años. El curriculum no supone un obstáculo para ello, ya que en Italia no se enseña a escribir hasta 1º de Primaria. Ni siquiera hay pizarras en la Infanzia. La atención es más asistencial que curricular. A mi parecer, esta etapa supone una prolongación de la guardería y de sus aulas se desprende un afecto diferente al de las aulas de Infantil en España. Me recuerda más al ambiente cercano que he visto en las guarderías de mis hijos. Si algo he aprendido, es que en Italia se respeta y alarga más la primera infancia.

Los niños van llegando gradualmente de 9 a 10 horas a conveniencia de los padres. Durante este tiempo juegan libremente o pintan. Después hacen una breve asamblea, cantan algunas canciones (apoyados por el altavoz inalámbrico que la seño ha pagado de su bolsillo -no hay pizarras digitales en las aulas de l’Infanzia-) y enseguida hacen la merenda (almuerzo). A continuación, rutina de baño y a poner la mesa en el comedor. Y es que cada niño trae de casa su vaso, su plato y sus cubiertos. Vuelta al aula, breve trabajo, a comer y al recreo.

Ambas tutoras del aula comen con sus alumnos todos los días. Digo bien, porque son dos las maestras que comparten grupo y aula, como también sucede en la etapa de Primaria. Estas cotutoras combinan sus turnos de mattino (de 8:00 a 12:30) y pomeriggio (de 10:30 a 16:00) coincidiendo dos horas al día en comedor y aula. Es un horario interesante cuyos turnos varían a lo largo de la semana. Trabajan menos horas que nosotros, pero también cobran mucho menos (unos 1600 euros mensuales), por lo que, al igual que en todos los sectores en Italia, las huelgas son muy frecuentes e imprevistas.

En cuanto al planteamiento de la Educación Especial en Italia, el perfil de maestra de Audición y Lenguaje no existe. El insegnante di sostegno (equivalente al maestro de Pedagogía Terapéutica) es el responsable de la atención educativa directa del alumnado con discapacidad. Este profesional no atiende al alumnado con necesidad específica de apoyo educativo, siendo las familias responsables de la atención que requieran sus hijos en horario no lectivo.

Lo más destacado del enfoque italiano es que cada alumno con discapacidad tiene un insegnante di sostegno y un operatore socio-sanitario (OSS -equivalente al Auxiliar Técnico en España-) que lo acompañan durante todo el día en su aula de referencia. El alumno jamás está “solo” con el tutor, siempre lo acompañan estos dos profesionales o al menos uno de ellos. Es más, se espera que el alumno tenga un mismo insegnante di sostegno y un mismo OSS durante cada etapa: una pareja de profesionales en l’Infanzia, otra pareja durante toda la Primaria y una última pareja en la Secundaria. Un enfoque muy diferente al español, donde la ratio de alumnos con NEE para AL y PT son de 26 y 15 respectivamente.

Durante mi estancia he podido apoyar de forma directa e indirecta a 7 alumnos no verbales (6 de ascendencia bangladesí y 1 ucraniana) con autismo, discapacidad intelectual y discapacidad motora escolarizados en diferentes aulas de Infantil y Primaria. Dado que uno de los objetivos de mi Plan de Actividades era dar a conocer ARASAAC (Portal Aragonés de Comunicación Aalternativa y Aumentativa), compartí con sus insegnanti di sostegno diferentes metodologías y materiales.  Tras ver el sistema de comunicación digital con pictogramas de una de mis alumnas, me solicitaron que elaborase uno igual en italiano para cada uno de estos niños. A nivel profesional, puedo decir que es de lo más gratificante que he hecho en mi vida.

Visitando esta escuela en Mestre he aprendido a valorar el pedazo de recurso que es ARASAAC, obviado y utilizado a diario en nuestras aulas por todos los profesionales de la Educación Especial. Es un orgullo que un material financiado por un gobierno regional sea de acceso público y facilite la comunicación a tantísmas personas en todo el mundo de manera  universal y gratuita. He disfrutado mucho mostrando sus aplicaciones metodológicas y ha sido indescriptiblemente satisfactorio dotar al alumnado no verbal de sistemas de comunicación.

Por último, a modo de valoración personal, quiero añadir que, a pesar de que había buscado información sobre el centro, no me esperaba un alumnado tan diverso culturalmente, lo que ha hecho que la experiencia haya sido mucho más enriquecedora y emocionante de lo esperado. Por otra parte, el profesorado de Infanzia, con el que más me he relacionado, ha sido muy cariñoso y atento conmigo y creo haber creado lazos de por vida que, sin duda, darán fruto a proyectos profesionales en el futuro.

Ha sido una experiencia MARAVILLOSA. Todos los docentes deberían salir y ver mundo, ver otras escuelas, otros sistemas educativos, otras metodologías. Aprendes de lo que no sabes y valoras y transmites lo que tienes. Nada sobra.

Una experiencia única, diferente y muy recomendable. GRACIAS.