Estancia profesional en Kimpinen Upper Secondary School en Lappeenranta (Finlandia)

Estancia profesional en Kimpinen Upper Secondary School en Lappeenranta (Finlandia)

¡Hola a todos!

Bienvenidos a esta entrada del blog relacionada con mi estancia en Finlandia durante los días 10 al 24 de mayo de 2025. Mi nombre es María Cánovas y como he dicho, tuve la suerte de poder visitar un centro finlandés durante dos semanas. Lappeenrannan Lukio Kimpisen Toimipiste es un centro donde solo existe la enseñanza de bachillerato, pero está en el mismo campus que el instituto de secundaria y el de primaria. Todos ellos se encuentran a 1 minuto de distancia y, como dato curioso mencionar, cabe mencionar que no hay verjas, por lo que es posible moverse de un edificio a otro sin ningún problema.

Es un centro urbano, aunque bastante tranquilo y muy diferente de una gran ciudad. Cuenta con 600 alumnos de bachillerato y 40 profesores. En secundaria, están matriculados unos 700 alumnos y cuenta con 60 profesores. Por último, primaria cuenta con 400 alumnos y 40 profesores. En cuanto a las actividades extraescolares, este centro no ofrecía actividades extraescolares por las tardes. Los alumnos suelen ir a diferentes actividades deportivas ya que el instituto está muy centrado en el deporte y la música.

En cuanto al horario, las clases empezaban a las 08:00h y terminaban a las 15:45h. Tenían 45 min para comer y 15 min de descanso entre clase y clase. Los profesores no tenían mucho contacto con las familias ya que son alumnos de bachillerato, bastante maduros y responsables. La disciplina de los alumnos es excelente. Los finlandeses son bastante silenciosos y reservados por regla general por lo que en las clases había un silencio bastante chocante. Los alumnos no hablaban entre ellos y cuando la profesora o yo misma les hacía una pregunta les costaba responder. Sin embargo, su rendimiento académico es muy bueno.

Sobre las TIC, todos los alumnos de bachillerato cuentan con un Chromebook y libros digitales por lo que los recursos TIC se usan a diario. Los alumnos son bastante autónomos y responsables. La profesora les explicaba al principio de la clase las tareas que iban a realizar e iba abriendo los diferentes ejercicios conforme iban terminando. Además, la profesora utilizaba diferentes aplicaciones tecnológicas para que los alumnos repasaran los contenidos del día anterior en grupo.

Los profesores del centro se reunían todos los miércoles a la hora del recreo para tratar los diferentes puntos de la semana. Tienen bastantes horas de preparación de clases a la semana ya que su carga lectiva es mucho menor que la que tenemos en España. En cuanto a la organización del espacio, el centro cuenta con todos los espacios y aulas perfectamente equipados para enseñar las diferentes asignaturas del currículo (clases de costura, clases de cocina, talleres de tecnología, clase de música).

El instituto en Finlandia es una realidad paralela a lo que conocemos como instituto en España. Los estudiantes son mucho más maduros, independientes y responsables (algunos incluso ya están independizados y viven solos). Creo que en España se puede comparar con los alumnos que asisten a la universidad.

En relación a la organización de la estancia, la coordinadora Erasmus + se encargó de todo el proceso. Me recomendó la época del año para asistir al centro y me ayudó a buscar alojamiento. Antes de llegar al país, me mandó el horario con las diferentes clases a las que iba a asistir y fue muy flexible a la hora de cambiar de clases según mis preferencias. Desde el primer día noté una clara diferencia entre el sistema educativo español y el finlandés. El gobierno invierte mucho dinero en educación e instalaciones y la cultura hace que enseñar sea un poco más fácil porque los alumnos son muy respetuosos y calmados. No creo que se deba tanto a las diferencias en la metodología sino a un nivel más general. El currículo es mucho más práctico y les resulta mucho más útil e interesante.

Por último, me gustaría destacar la gran oportunidad que ofrece esta beca para poder vivir esta experiencia. Creo que hay que aprovechar estas movilidades para conocer otros sistemas educativos e incluir las nuevas ideas/prácticas aprendidas en nuestro día a día. Animo a todo aquel que esté en duda a vivir esta experiencia ya que sirve como enriquecimiento tanto personal como profesional. De esta movilidad me llevo nuevos socios con los que seguir trabajando para poder proporcionar a nuestro alumnado la mejor educación posible.