Estancia profesional en Lycée Athénée Royal de Pont-à-Celles en Pont-à-Celles (Bélgica)

Estancia profesional en Lycée Athénée Royal de Pont-à-Celles en Pont-à-Celles  (Bélgica)

Mi estancia profesional en el Lycée Athénée Royal de Pont-à-Celles (Bélgica) se definiría como una experiencia enormemente gratificante y sobre todo, muy provechosa. Me llamo Gloria L. Folguerá, y soy profesora de Francés en el IES Les Foies de Benigànim (Valencia). Siempre dispuesta a aprender y adoptar nuevas metodologías motivadoras para mi alumnado, he podido disfrutar de dos semanas de inmersión lingüística y pedagógica con mis colegas belgas. Ha sido, sin duda, una estancia muy enriquecedora no sólo a nivel profesional, sino también a nivel académico y personal ya que he podido entablar grandes vínculos de amistad con colegas con los cuáles tenemos previsto colaborar en breve.

El Athénée Royal de Pont-à-Celles es una escuela pública ubicada en la localidad de Pont-à-Celles, en la región de Valonia, Bélgica. Se trata de un centro de enseñanza rural, que ofrece una variedad de programas educativos, abarcando básicamente la educación secundaria.

En concreto, este centro es un ejemplo de cómo las escuelas rurales en Bélgica combinan la educación general y técnica, al mismo tiempo que se mantienen al día con las tendencias pedagógicas y tecnológicas modernas.

En cuanto a las diferentes intervenciones llevadas a cabo dentro del aula durante mi estancia destacaría el apoyo como docente, en aquellas actividades que lo requerían, en las clases de español, colaborando con la profesora, tanto como auxiliar de conversación en las actividades de expresión oral en lengua española, como en las de comprensión y expresión escrita ayudando al alumnado con mayores dificultades. Sobre todo, en las actividades más complicadas para ellos, que como cabía esperar, son aquellas de comprensión oral. Aquí me gustaría destacar que el hecho de poder observar de primera mano a dos personas interactuar en español, impactó positivamente en la curiosidad del alumnado belga por la lengua española, acostumbrado a escuchar solo grabaciones o intervenciones de su habitual profesora.

En este apartado, me gustaría destacar la actitud tan diferente del alumnado belga dentro del aula en comparación con el alumnado español; en concreto, resaltaría el gran respeto que el alumnado muestra hacia el profesorado en todo momento. Quizás este aspecto debería replantearse en nuestro sistema educativo.

También tuve la oportunidad de elaborar diversos recursos didácticos para facilitar diferentes situaciones de aprendizaje para mi profesora anfitriona, entre ellos cabe destacar la elaboración de un CANVA para presentar al alumnado las tradiciones navideñas españolas motivando su participación a partir de la comparación. Como curiosidad, destacaría su sorpresa al conocer la historia de los Reyes Magos.

Evidentemente, también mi condición de profesora perteneciente a la Comunidad Valenciana les suscitó la curiosidad por aprender la receta de la Paella como plato típico español.

En definitiva, durante estos días fui embajadora de la lengua y cultura española, rompiendo los estereotipos establecidos, dando a conocer la diversidad lingüística y cultural de nuestro país, e incluso estableciendo un comparativa con la belga.

A modo de recapitulación, estos 15 días han supuesto para mí:

  • A nivel de centro, gracias a esta experiencia, el 2025/2026 promete ser un año de gran impulso para la colaboración entre ambos centros. A través del intercambio de alumnado, la correspondencia epistolar, los proyectos virtuales y los futuros proyectos Erasmus+, se pretende construir una relación más sólida y enriquecedora que no solo beneficie a los estudiantes en su formación académica, sino que también promueva el entendimiento mutuo y el respeto entre las culturas. Estos proyectos conjuntos serán una excelente oportunidad para que los jóvenes de ambos países se conviertan en ciudadanos más globales, competentes y conscientes de los retos y oportunidades que ofrece el mundo actual.
  • A nivel profesional, no cabe duda de que estos 15 días me han dado la oportunidad de observar y participar en un sistema educativo diferente al nuestro, lo cual permitirá ampliar mi perspectiva sobre la enseñanza del francés como lengua extranjera, identificando áreas de mejora en mi propia práctica docente, especialmente a la hora de tener en cuenta las diferentes necesidades y ritmos de aprendizaje de los estudiantes.
  • En cuanto al aspecto personal, esta estancia ha constituido un auténtico período de inmersión cultural y lingüística que me ha permitido refrescar y poner al día mis competencias lingüísticas.

Por último, me gustaría mostrar mi agradecimiento a la Dirección del centro, dispuesta a atender mis peticiones en todo momento, pero, sobre todo, a mi profesora anfitriona Sofía Injoque Palla, quien desde el minuto cero ha hecho lo imposible para que mi estancia fuera lo más provechosa y cómoda posible.