Recursos contra la desinformación

Recursos contra la desinformación

La desinformación es uno de los fenómenos centrales de la sociedad digital actual. El continuo bombardeo de noticias, fotografías, vídeos, etc, creados con un fin distinto a la simple oferta informativa veraz, no hace más que acrecentar un sentir general de desconfianza en la ciudadanía. En paralelo, esto podría generar una sensación de falsa certeza en la población vulnerable (sobre todo en los menores) sobre hechos que, a menudo, no están verificados.

El mundo educativo no queda exento de estos comportamientos. Internet es una fuente directa de información que ayuda a los docentes a ofrecer los saberes básicos contextualizados en escenarios de aprendizaje próximos al mundo en el que vivimos.

El informe International Civic and Citizenship Education Study (ICCS) es un estudio que se desarrolló en 2022 y en el que participaron 3.400 equipos directivos, 40.000 docentes y 82.000 estudiantes de 2º de la ESO. Incluye las percepciones y actitudes más relevantes sobre civismo y ciudadanía en Europa. Los resultados arrojan datos clave, tales como que menos de 1/3 de los estudiantes indicaron estar algo o muy interesados en temas políticos o sociales, así como que las percepciones de un ambiente abierto en el aula para debatir sobre diferentes temas, se asocian de manera positiva con el conocimiento cívico.

En esta línea de trabajo, os presentamos un recurso que puede servirnos en nuestra tarea educativa para ayudar a que nuestro alumnado desarrolle el pensamiento crítico y aprenda a discernir y protegerse de las amenazas que plantea la desinformación. El recurso Cómo detectar y combatir la desinformación, es un kit de la Comisión Europea destinado a docentes, que ofrece materiales para inculcar a los estudiantes habilidades de navegación en línea, centrándose en lo que se conoce como desinformación, que es el objetivo primordial del kit. Otro de los propósitos del manual es ayudar a los estudiantes a detectar técnicas de manipulación y desarrollar destrezas que le permitan evaluar la información por sí mismos.

Se trata de un material abierto y de uso libre para cualquier centro educativo, destinado a adolescentes entre 15 y 18 años de edad, aunque puede adaptarse a otros grupos de edad. El recurso está diseñado para una o dos sesiones. Se acompaña de una presentación que incluye diferentes enlaces a recursos en línea, así como prácticos estudios de casos sobre los que debatir.

Se divide en las siguientes secciones:

      • Una introducción destinada a que el alumnado reflexione en torno a la desinformación: qué es, cómo funciona y cómo reaccionar ante ello.
      • Una primera parte profundiza sobre ¿Qué es la desinformación?. Comprende las diapositivas 3 a 8 de la presentación, y ahonda sobre la vulnerabilidad y la facilidad con la que se puede ser engañado.
      • Una segunda parte sobre ¿Cómo funciona la desinformación?, que comprende las diapositivas 9 a 14. Aborda como se propaga la desinformación, los mecanismos y tácticas que se emplean para generar confusión, la facilidad con la que se extiende a través de las redes sociales, o el uso de imágenes fuera de contexto para crear una narrativa falsa.
      • Una tercera parte sobre ¿Cómo responder a la desinformación?, diapositivas 15 a 20, que proporciona consejos útiles para luchar contra la desinformación. De igual forma, informa sobre qué está haciendo la Unión Europea al respecto, y las medidas que pone a su alcance para combatir la desinformación.
      • Pon último, una cuarta parte práctica pone a disposición cuatro estudio de casos sobre los que debatir y reflexionar en grupos: la creciente influencia de la teoría de la conspiración QAnon, titulares engañosos sobre salud, ¿son los pájaros reales?, y discusión en las redes sociales sobre las elecciones.

Se puede obtener más información consultando el material en formato presentación y el kit para docentes.

Fuente de la imagen: Freepik