Educación conectada: la escuela en tiempos de redes

Educación conectada: la escuela en tiempos de redes

El proceso creciente de digitalización que vivimos está generando una profunda transformación en nuestras maneras de relacionarnos, aprender, educar, trabajar, liderar personas, proyectos y organizaciones. Su impacto ha modificado todos los ámbitos de nuestra vida, desde lo más privados y personales hasta los más públicos y profesionales. Lo digital no es sólo un conjunto de tecnologías es, sobre todo, una nueva manera de hacer las cosas. Tiene que ver más con el ámbito de la cultura que con el de la tecnología. Está más relacionado con el ser que con el estar, y más con el saber estar que con el saber hacer. Y a la larga, su impacto no está tanto en hacer lo mismo de siempre con otras herramientas como en hacerlo de una manera sustancialmente diferente. Es, para algunos, una de las pocas disrupciones de la historia de nuestra especie. De aquéllas que han modificado profundamente nuestro sistema productivo y por tanto nuestros hábitos y nuestros modos de producción.

Si hay algo en lo que parece haber un consenso general ante la incertidumbre y el continuo cambio en el que vivimos es en la afirmación de que la web social está aquí para quedarse (Nielsen, PewInternet). No importa tanto qué tecnología dominará (aunque la elección de tecnología no sea neutra ni exenta de consecuencias), ni si la oferta estará centrada en una sola plataforma o en varias (aunque siempre sea preferible la diversidad y la multiplicidad a la homogeneidad y la unicidad). Lo que parece poner de acuerdo a unos y a otros es la relevancia del “giro social” que Internet ha experimentando en los últimos diez años. Una transformación que, recordemos, sólo acaba de empezar, pero que ya nos ha llevado desde una Internet unidireccional, de unos pocos, publicitaria y principalmente de broadcasting a otra construida sobre la “democratización” de la producción y el acceso a la información, basada en la participación y la interacción constante y caracterizada por la conversación, el diálogo y la colaboración de muchos.

Por otro lado, por su propia naturaleza, por su enorme relevancia social, por su alto impacto como instrumento de solidaridad y redistribución de la riqueza y su importancia en la construcción de un futuro mejor, la educación y el aprendizaje no pueden, de ninguna manera, ser ajenos a esta transformación.

De hecho, no lo han sido. Lo digital, Internet, la Red, la Web 2.0 o la Web social hace tiempo que han entrado en las aulas. Y lo han hecho, como no podía ser de otra manera, de la mano de los alumnos (The Internet & Education PewInternet Report; Teens and social media. PewInternet), los profesores (Aulablog, Espiral, Hack Education..) y las familias (padres 2.0,…) quienes, en muchos casos, frente a la pasividad, los miedos o la inacción de otras instancias, están liderando la transformación.

Suenan campanas de cambio aunque nos basta recurrir a la memoria para confirmar que no son nuevas y que las voces que cuestionan el sistema educativo y que demandan un modelo mucho más integrador y conectado hace años que nos acompañan. El debate sobre la necesidad de reforma de la educación y sobre el papel de la tecnología en esta transformación ha sido algo recurrente al menos en los últimos 40 años. Los mayores recordarán, quizá con cierta nostalgia, la avalancha de documentos e informes que, desde distintos ámbitos, se produjeron en la décadas de los 60 y los 70 a favor de la imperiosa necesidad de este cambio (Aprender a ser, Informe Fauré. UNESCO 1972; Sociedad del aprendizaje, Robert Hutchins, 1968 y Torsten Husén, 1974). Recordarán también con divertida expresión las numerosas iniciativas y proyectos que entonces se pusieron en marcha para incorporar la tecnología a la Educación y de las que a modo de ejemplo nos basta con este estupendo extracto de un video realizado en 1967 en el que se predecía cómo sería la educación en 1999.

1999 A.D. Learning por donaldtheduckie

Tan enraizado (y tan necesario) está en nuestra cultura el debate entre Educación y reforma y tan acostumbrados estamos, desgraciadamente, a que apenas se produzcan cambios que aceptamos sin mayor sorpresa que alguien pueda decir, desde la dirección de una de las principales instituciones de enseñanza europea, “siempre pensé que lo importante de la vida ocurría fuera de clase“ (François Dubet). Pero al igual que ha cambiado nuestro concepto de tiempo libre o que el trabajo hace tiempo que dejó de ser un lugar a donde ir, la Educación parece por fin abocada al cambio. Aprender es más que nunca un asunto no circunscrito únicamente a unos espacios concretos (las aulas), ni a unos contenidos normalizados (los currícula), ni siquiera es ya sólo una cuestión entre legisladores, profesores y alumnos (desintermediación, aprendizaje entre pares, nuevos roles del profesor). Es algo que nos incumbe a todos y que sucede en cualquier lugar y en cualquier momento (Juan Freire, Tíscar Lara, Cristóbal Cobo, Zemos98) y de ahí la relevancia de hablar de educación conectada, donde lo importante es ser capaces de dar respuesta al por qué y qué estudiamos, al cómo lo hacemos, al dónde y de quién aprendemos (DML Central; Hastac; Hybrid Pedagogy). Y aunque sabemos que son múltiples los argumentos para sostener que el aprendizaje siempre fue conectado y social, parece que cobra fuerza la idea de que el aprendizaje será conectado o no será y en este proceso la Red y la web social es evidente que desempeñarán (ya lo hacen) un papel importante.

“Educación conectada: la escuela en tiempos de redes” (#REDucación), pretende poner en contexto el impulso de transformación educativa provocado por la irrupción de la Red. Quiere ser, ante todo, un espacio de reflexión y práctica sobre el impacto de Internet y las redes sociales en la docencia y el aprendizaje. El curso está articulado alrededor de cuatro grandes ejes, cuatro ámbitos que están siendo afectados profundamente por las redes:

1. APRENDIZAJE EN RED (José Luis Cabello, David Álvarez, Juan Sánchez Martos), desde donde se abordarán las nuevas formas de enseñar y de aprender en red (comunidades de prácticas, de manera conectada, aprender de la experiencia propia y de otros) y en la Red (internet, las fuentes de conocimiento, los recursos abiertos, los medios sociales). Internet ha modificado radicalmente nuestra capacidad de acceder y producir conocimiento (REA), ha modificado también los equilibrios de autoridad y el rol tradicional del profesor (educators as curators), las dinámicas del aula (flipped classroom; uso de hashtags en educación), los sistemas de reconocimiento (badges), nuestras maneras de estar al día (Los PLE son para el verano) y nuestro territorio de referencias y conexiones (Siemens y Downes). Cada vez se hace más necesario aprender a aprender en red (#ETMOOC), colectivamente, de manera conectada (conectivismo), con otros y de otros (A teacher’s guide to social media).

Metropolitan railway

2. VIVIR EN LA RED (Antonio Omatos Urko Fernández y Víctor Cuevas) que tiene que ver con la gestión personal y profesional de las redes, con la identidad y la huella digital, con el derecho al olvido pero también con el derecho al futuro, con la privacidad y el buen uso de las redes, con la protección de datos y los menores y por tanto con la necesidad de una enseñanza en el aula sobre el uso las redes sociales. En definitiva, con el necesario aprendizaje para vivir en la Red y la inexcusable responsabilidad de equipos directivos, padres y profesores en ese proceso de aprendizaje. Negar el impacto y la incidencia de las redes sociales en el aula, prohibirlas o mirar para otro lado no parece una opción razonable (aquí), ni responsable (Internet, redes sociales y el olvido. David Maeztu: encuentro didactalia 2013)

3. ESCUELA ABIERTA (Lorena Fernández, Carlos Magro). Si aceptamos que la web social ha provocado ante todo un cambio en las maneras de relacionarnos y comunicarnos, no podemos ignorar su incidencia en el aula y en los centros educativos. Las redes ofrecen nuevas oportunidades para mejorar la comunicación entre los miembros de la comunidad educativa (profesores, alumnos, equipos directivos, familias) entre sí y del Centro educativo con su entorno. Son una oportunidad para mejorar la integración del sistema educativo, son un camino para abrir las aulas y aspirar a una escuela abierta. Qué es la identidad digital de un centro educativo , quién la construye (Branding the Learning Organization), cuáles son las nuevas formas de comunicación e integración digital de las que dispone un centro educativo o sus profesores para relacionarse con su entorno cercano son sólo algunas de las cuestiones que se abordarán en esta sesión. El objetivo: ser capaces de diseñar al final de la jornada un modelo de presencia en la Red, un mini plan de medios, tanto individual para cada profesor como de todo el Centro (Eudora Schools: Embracing Social Media and Creating a Digital-Friendly School District).

4. TRABAJAR EN LA RED (Julen Iturbe; Charo Fernández) abordará cómo la introducción de las lógicas digitales en el aula moviliza nuevas competencias y amplifica otras que tiene que ver con el aprendizaje en red, el trabajo colaborativo y distribuido y el trabajo por proyectos. Competencias y habilidades que son esenciales hoy en día para el desarrollo profesional de las personas (21st Century Skills, Framework for 21st Century Learning, Education to employement Mckinsey) y claves para formar ciudadanos y profesionales capaces de vivir y trabajar en entornos cambiantes e inciertos, de saber reaccionar y adaptarse ágilmente a estos cambios y, en definitiva de saber colaborar y cooperar en red.

El curso, en definitiva, pretende un debate abierto entre todos los participantes en torno a preguntas sencillas como: ¿Por qué los educadores deben estar en las redes sociales? ¿Cómo selecciono fuentes válidas y contenidos de aprendizaje en la red? ¿Qué es un PLE y cómo utilizarlo en el aula? ¿Cómo puedo aprender de la experiencia de otros? ¿Qué es la identidad digital? ¿Por qué es importante saber gestionarla y enseñar a los alumnos a hacerlo? ¿Se pueden utilizar las redes sociales para mejorar el aprendizaje?¿Quién y cómo lo está haciendo? ¿Cómo utilizarlas para comunicarme con alumnos y familias? ¿Cómo se trabaja en red?… En definitiva, “Educación conectada: la escuela en tiempos de redes” (Inscripción) aspira, modestamente, a poner un granito en el proceso de transformación de la Educación, para ser capaces, entre todos, de revertir la frase de Davies y educar no contra la experiencia sino desde la experiencia y con la experiencia de otros (colectiva, en red y compartida).

                                                                                   Autor: Carlos Magro

Imágenes: St. Thomas Grammar School, London Underground Map 1923.